Ruta del Agua

4.- HISTORIA-DESCRIPCIÓN

El agua ha condicionado la vida del municipio de Adeje, quedando dibujada su presencia en buena parte del trazado y la arquitectura del casco antiguo adejero. Su presencia se refleja en la existencia de una gran cantidad de galerías, el Barranco del Infierno, recuerdosde antiguos molinos, ingenios de azúcar, tarjeas, aljibes y variadas formas de canalización y aprovechamiento.

El rescate etnográfico hace una evocación de la cultura del agua y rinde homenaje a las generaciones que durante siglos vincularon su vida a la existencia de un recurso tan necesario. Cada año, el Grupo de la Escuela Municipal de Folclore de Adeje organiza La Ruta del agua, en la que ésta hace de vínculo entre los oficios, las labores domésticas, las fórmulas de canalización y distribución. Todo el patrimonio cultural en torno al líquido elemento se muestra en estampas como el lavado de la lana, el trasiego de animales y un amplio abanico de escenas costumbristas.

La gastronomía tradicional, la implicación vecinal, la descripción de las labores en español e inglés para favorecer el disfrute turístico acompañan el trabajo de este Grupo de la Escuela Municipal en su homenaje anual al agua.

Esta iniciativa da a conocer la simbología e historia de la sociedad adejera, vinculada y dependiente de este recurso. La escenificaciónse hace a lo largo del recorrido que hacía el agua procedente del Barranco del Infierno hasta su llegada al casco histórico de la Villa.

En la ruta se visitan todos los inmuebles e infraestructuras vinculadas al agua, en los que se representa lo que podía ser la vida en torno a esos elementos históricos. Se pueden ver aguadoras, lavanderas, cocineras, arrieros, agricultores, canaleros, albañiles o frailes, que desempeñan su oficio, además de otras ocupaciones cotidianas como teñir telas, coladas, descamisado y desgranado y limpieza del millo, ordeño de animales, fregado de la loza, trabajo de la lana, cuidado de animales, venta de cochinos, etc.

La escenificación se narra en español y en inglés con lo que se explica el significado de la escena y su impronta histórica, aprovechando además para resaltar la importancia del elemento patrimonial de que se trate. Durante el recorrido se puede visitar una pequeña exposición que se prepara para cada edición con diferente temática, compuesta por piezas de otras épocas de uso común en las casas. El grupo organizador se encarga de elegir la temática y una vez decidida, se comienza la labor de localizar dichas piezas entre los vecinos del Municipio, quienes la ceden para el evento.

La asistencia a la ruta es totalmente gratuita y está organizado por el Grupo de la Escuela de Folclore de Adeje. La ambientación que se usa a lo largo del recorrido se divide en dos partes: la primera, representa la sociedad del siglo XVIII, que se escenifica en la zona más antigua del casco histórico y la segunda, que se realiza en la zona más moderna, usando vestimenta de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. También se ofrece a los visitantes una degustación de productos tradicionales, colaborando un grupo de persona mayores del municipio en la elaboración de rectas como los ñames con miel de abeja, gofio amasado con miel y almendras, tafeña de trigo y vino de la zona.

El sur de Tenerife, casi siempre árido y seco, ofrece históricos vergeles que nacen al amparo de la presencia del agua. Esta actividad de rescate etnográfico es un exponente del continuo homenaje de la humanidad al recurso que nos da la vida.

5.- FOTOGRAFÍAS