Tajaraste de El Amparo

4.- HISTORIA-DESCRIPCIÓN

Actualmente, la asociación cultural “Tradiciones El Amparo, Tajaraste” tiene recopilado los diferentes bailes en vigor (baile Corrido, baile de Cuatro o Sentado y el baile de la Danza de la cinta). Todos estos bailes nombrados, siguen estando acompañados como anteriormente se hacía,  además de, los diferentes instrumentos: tambor, castañuelas, acordeón y flauta.

Se prioriza la actuación del Tajaraste a los días de las fiestas del Amparo en agosto, además de, acompañar a las diferentes festividades del barrio. También, la asociación cultural se dirige hacia  donde les soliciten para pasar un buen rato al son del Tajaraste. Llegado el turno del Tajaraste, o  como ya dije Tajarastes del Amparo, banda sonora sempiterna en todas las festividades de ese barrio  icodense, en primer Iugar, cabría señalar, objeto de una evolución desde modelos formales más  primitivos, a los que ya hacía mención el musicólogo Don Juan Reyes Bartlet, en un arficulo aparecido en la Revista Hespérides, allá por el año 1926, donde se lo describía:

“(…) Aquí en esta parte de Icod, existia hasta hace pocos años lo que llamaban “Baile Corrido”,  de origen guanche asimismo y cercano pariente por línea rítmica del Tajaraste y Tanganillo. Mozos y  mozas lo ejecutaban bajo las arcadas de la media naranja de las ermitas en todas las fiestas. Lo  tañía en flauta y tambor el mismo individuo, algo así como el gaitero astur o galaico. Ambos  instrumentos eran de tosca construcción indígena. La Flauta, de tubo cilíndrico con embocadura  biselada e antiguo caramillo e incrustaciones de plomo, tenía tres orificios en la parte superior  para los dedos mayores de la mano izquierda, y por debajo uno para el pulgar. El meñique solo  servía para sostener el tambor, el cuál hacían sonar con la restante mano derecha por medio de una  baqueta”. (…)

Y por otra parte, se lamentaba en ese mismo articulo del cambio de los tiempos y la introducción del acordeón que desde entonces hasta hoy reina con su presencia en los aires de tajaraste del  Amparo “(…) Siento desazón por la muerte de los cantos y bailes de la rierra canaria, y al  decirlo, hago gracia de este articulo al bravo flaurlsta del barrio del Amparo, Pancho Ramón,  rapsoda insigne, último superviviente de la invasión acordeónica, que aún hace sonar la flauta, de tarde en tarde, con dejo lánguido y nostálgico (…)” Sin llegar a un estudio extenso del  Tajaraste, que no es objeto y fin del presente trabajo, aunque si recomendado la lectura del  articulo titulado El Tajaraste Tinerfeño: estudio de su versificación y otros propósitos, del  investigador icodense Don Estanislao González González, para aquel que quiera profundizar en este  tema, así como trabajo anterior del mismo autor, sobre las posibles raíces brujeriles del Baile  Sentado (otra modalidad de Tajaraste), y que para el que escribe, en realidad no es otra cosa que  prácticas paganas —que quizás tuviesen su origen en danzas ejecutadas por las Maguadas guanches –  de ahí de tildar al baile de brujeril o relacionadas con bailes de brujas, por la iglesia oficial.

Por tanto, voy a continuar con un breve acercamiento al Tajaraste, en sus variantes más conocidas,  Baile Corrido y Baile Sentado que aún perduran en el Amparo — el llamado Baile de La Lanza, que  antes también se bailaba en El Amparo, ya dejo hace años de ejecutarse -, así como una descripción  de la coreografía que les acompaña. Para lo cual acudimos una vez más al libro de Lorenzo Perera  sobre las Fiestas del Amparo.

En primer Iugar, el profesor Lorenzo Perera nos describe el Ilamado Baile Sentado o de A Cuatro:

Su título nos explica claramente cuáles eran las peculiaridades de este baile que en contadísimas  ocasiones acostumbra a interpretarse en las Fiestas de El Amparo: “no se baila porque es de más orden”. Intervienen dos hombres y dos mujeres dispuestos en forma de cuadrado, de manera que cada  mujer se encuentra limitada por dos hombres y viceversa.

El siguiente baile, el denominado Baile Corrido, variante de Tajaraste como el anterior, se describe como más movido y animado, los que intervienen en el baile, se disponen en dos hileras, en  cada una de las cuales se alternan hombres y mujeres de forma que, al enfrentarse en los cambios de  posición, a cada hombre le corresponde una mujer y viceversa. Las dos filas, de forma avivada, se  mueven en una y otra dirección y se entrecruzan cuando uno de los bailadores cambia, guiándose por  la subida de tono que hace el tocador. Y nosotros añadimos que ese cambio de dirección también  viene marcado, por las órdenes de mando que se da el transcurso de la danza: ¡Pa’ La Vega,! i Pa’ El Amparo!

Este último género de Tajaraste es el que actualmente pervive y se baila en El Amparo. Y a que falta de un estudio más riguroso podría tener un sustrato aborigen y de culto solar, por la dirección en la salida de la divinidad aborigen Magec — El Sol -, y que apuntamos podría corresponder el orto y el ocaso del mismo (este-oeste), que creemos rastrear en la dirección que  sigue el baile, y por tanto nos encontraríamos con un baile de un marcado carácter ritualístico en su origen.

Autor: Miguel Edmundo Delgado López (https://www.facebook.com/ayuntamientoicoddelosvinos/posts/el-tajaraste-y-la-romeria-del-poleo-del-pago-del-amparo-parte-3el-mismo-ambiente/3191172720972788/)

5.- FOTOGRAFÍAS